¿Qué es la flacidez?
Se conoce como flacidez los cambios en la tonicidad y firmeza de la piel que se van sufriendo a lo largo de los años. Esta pérdida de firmeza se debe a la reducción y debilitamiento de los tejidos que la sostienen: el colágeno y la elastina. En este post, vamos a darte algunas claves para prevenir la flacidez.
¿Las causas de la flacidez?
Sin duda, las causas de la flacidez son muy variadas y de diferente índole: oscilaciones de peso importantes, embarazos, cambios hormonales, alimentación, el sedentarismo, exceso de exposición al sol, genética o incluso el tabaquismo. Es más evidente en el tercio inferior del rostro, cuello, escote, cara interna de brazos y muslos y abdomen. Asimismo, las oscilaciones bruscas de peso y volumen en algunas zonas del cuerpo como abdomen, caderas y pecho, pueden producir además de la flacidez la formación de estrías.
¿Qué fases tiene la flacidez en las mujeres?
En las mujeres la secuencia de los cambios suele ser de la siguiente manera:
- A partir de los 30 años se produce un inicio del descenso de la piel de la cara, párpados superiores y los pliegues nasolabiales se profundizan
- A partir de los 40 años se producen arrugas en la frente y ondulacion de la línea mandibular
- A partir de los 50 años el cantus lateral comienza a inclinarse hacia abajo, la punta nasal empieza a descender, y en el cuello se inicia una reabsorción del tejido adiposo
- A partir de los 60 años se empieza a atrofiar la piel del párpado superior.
En los hombres la piel es más rica en colágeno, más elástica y más firme. Además, es algo más espesa que la piel femenina, por ello aunque las pieles masculinas suelen tener menos arrugas, estas son más profundas. Cada vez son más los hombres que demandan tratamientos médicos para el cuidado de su piel.
Posibles soluciones a la flacidez
Teniendo en cuenta que una crema no puede revertir la flacidez, ya que es un problema de tejidos más profundos inalcanzable por este medio, Surgen diferentes técnicas de “rejuvenecimiento” tridimensional (en función del grado, se dividen en tres grupos)
1.- Plano externo de la dermis superficial: láseres ablativos o no ablativos (un láser ablativo quita sustancia, y aunque sea superficial rebaja la profundidad de la piel; no ablativo es una luz que aunque irrita pero no llega a estos niveles. Con el ablativo deja secuelas y con el otro no), peelings, luz pulsada, Biodermogénesis…. Para mejorar la textura de arrugas finas.
2.- Plano dérmico medio-profundo: lifting, hilos tensores, toxina botulínica o rellenos.
3.- Plano profundo subdérmico: rellenos de grasa propia, ácido hialurónico, etcétera
Actualmente existen buenas alternativas médicas – con equipos de última generación, homologados y con resultados contrastados – para el tratamiento de la flacidez en cara y cuerpo, así como para las estrías.
A) La biodermogénesis estimula los fibroblastos (las células que producen el colágeno) de las zonas tratadas para la formación de un colágeno nuevo, que aporte una mayor firmeza y elasticidad a la piel. Es un tratamiento médico, indoloro cuyos resultados son apreciables a las pocas sesiones.
B) Láser Q-Switched Nd-Yag (Clearlift) Se destruyen la fibras de colágeno de las zonas tratadas, estimulando así la formación secundaria de nuevo colágeno de una mayor calidad. Esta técnica debe repetirse a las 6-8 semanas en 2-3 ocasiones para obtener óptimos resultados.
La diferencia es que la biodermogénesis no destruye tejido para la creación de nuevo, si no que estimula a los fibroblastos.
Ambos tratamientos son compatibles con el sol y al no dejar secuelas visibles (no producen heridas, ni hinchazón, ni deja secuelas que impidan llevar una vida normal) son cada vez más demandados, tanto por hombres como por mujeres.
Otras consideraciones para prevenir la flacidez
Estos tratamientos deben ir acompañados de hábitos saludables:
- No fumar – el tabaco provoca que cada 10 años se envejezcan 2,5
- Evitar el sol sin protección, ya que es uno de los factores mas importantes en la apariencia del envejecimiento cutáneo prematuro.
- Hacer ejercicio diario con moderación.
- Buena alimentación para prevenir la flacidez.
- Visitar al dermatólogo para que recomiende las cremas más adecuadas para cada tipo de piel